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Albihar, Administrador

08 junio 2017

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Ilusión y alegría en el II Certamen Cocina de Ilusión

Una experiencia inolvidable que mezcla los sabores tradicionales con el cariño y el amor de las personas mayores.

Ayer se celebró el II Certamen “Cocina de Ilusión», dirigido al voluntariado de acompañamiento a mayores de la Fundación Albihar. Una jornada enriquecedora y de disfrute para todos los participantes (mayores, voluntariado, jurado, cocineros…)  que el propietario y conocido maestro de cocina del Restaurante «Real Asador de Castilla», Antonio Moya, hizo inolvidable.

La cita, que tuvo lugar en el Centro Cívico Marqués de Mondéjar de Granada, congregó a unas 30 personas: mayores, voluntarios, representantes del Ayuntamiento de Granada, y como no, a los miembros del Real Asador de Castilla.

El certamen, consistía en la elaboración de un plato de comida por parte de la persona mayor participante junto con su voluntario, con el objetivo de que los mayores se relacionasen y conocieran a gente nueva, además de disfrutar todos juntos. Todo ello dentro del programa de voluntariado de acompañamiento a mayores. Para la degustación de los platos, el jurado estaba compuesto por la coordinadora de Derechos Sociales, Educación y Accesibilidad Ayto. Granada, Francisca Martín, el cocinero del restaurante Real Asador de Castilla, Antonio Moya, la Directora del Centro Cívico Marqués de Mondéjar, Victoria del Águila y la patrona de la Fundación Albihar, Mercedes Casares.

Los mayores pusieron todo su cariño en la elaboración de sus platos, que hicieron las delicias tanto del jurado como del público asistente. No obstante, en esta ocasión no había premios para los mejores platos, ya que todos tenían algo muy valioso que aportar: mucha ilusión. Eso sí todos ellos recibieron un magnífico recuerdo, cortesía de El Corte Inglés de Granada.

A todo ello hay que sumarle toda la ilusión que aportó Antonio Moya y todo su equipo del Real Asador de Castilla, quien deleitó a los presentes con una invitación de comida en el lugar. Un  broche de oro a una jornada enriquecedora en todos los sentidos.

UN DÍA INOLVIDABLE

Si hay algo en lo que coincidieron todos es que fue un día inolvidable gratificante y divertido. Moya, mostró su satisfacción por el rotundo despegue del certamen y aplaudió la jornada vivida y su gran participación, donde todo el mundo estuvo abierto a aprender y a compartir. Por su parte Francisa Martín, destacó la intergeneracionalidad vivida y la gratificación de la jornada.